La Importancia De Un Proyecto Personal En La Vida Del Emprendedor

 

 

Los proyectos, entendidos como ideas que se piensan realizar de una forma concreta y utilizando unos recursos definidos, no son solo cuestión de emprendedores, o de personas que buscan alguna alternativa para obtener ingresos; los proyectos personales son fundamentales para alcanzar las metas y sueños que tenemos como seres humanos y por supuesto, también como empresarios.

 

Darse a la tarea de estructurar un proyecto de vida personal, permite darles claridad a los sueños, experimentar y aprender cosas nuevas que normalmente no se hacen en el día a día, y aprender nuevas habilidades o mejorar las que ya tenemos.

 

Cuando trazamos nuestro proyecto personal, estimulamos la creatividad, y trabajamos en él sin ningún tipo de restricciones, nadie nos impone las fechas ni las metas, y podemos definir nuestro ritmo de trabajo y nuestras prioridades.

 

Los proyectos personales no son rivales de cualquier otro proyecto que tengamos en nuestra vida, ya sean laborales o empresariales, todo lo contrario, un proyecto personal puede incluir proyectos laborales o de emprendimiento.

 

Es fundamental que antes de emprender, estructuremos un proyecto que involucre otras áreas de nuestra vida, y donde el emprendimiento sea una parte importante. Sobre todo, porque tener una empresa requiere cambios en la forma como pensamos, actuamos y nos relacionamos.

 

Cuando elaboramos nuestro proyecto de vida, estamos contemplando nuestra individualidad, autoconocimiento y desarrollo personal, que nos preparan para alcanzar el éxito en nuestro proyecto empresarial.

Los proyectos personales y el emprendimiento coinciden en las expectativas, los intereses y las necesidades del emprendedor, de hecho, un proyecto empresarial responde a las preguntas que al respecto nos hacemos los seres humanos.

 

Un proyecto empresarial puede darles sentido a nuestras vidas e impulsar el desarrollo pleno del proceso personal si se trabaja con madurez, sentido de realidad, respeto por los plazos y suficiente creatividad; así mismo la búsqueda del propio desarrollo personal, antes que amenazar al proyecto de emprendimiento, es una condición necesaria para ser un propietario y socio competente de un negocio.

 

La clave de los dos proyectos, el personal y empresarial, es la correcta planeación del mismo, la imperiosa necesidad de escribirlos, para darles sentido de urgencia y claridad, y tomar acción con prontitud sobre ellos para poder maniobrar, en caso que se necesite reestructurarlos de acuerdo a las circunstancias que lo afectan.